El Barça muere en la orilla ante el Veszprém y se despide del Mundial de Clubes

Los de Carlos Ortega caen eliminados (34-39) en las semifinales del Mundial de Clubes en un partido que se decidió en la prórroga

La actuación de Corrales en portería y la inspiración de los exazulgranas Fábregas y Cindric dictaron sentencia para el Barça

Carlsbogard en una acción de partido ante el Veszprem

Carlsbogard en una acción de partido ante el Veszprem / @FCBhandbol

Nil Jaimejuan

Nil Jaimejuan

El Barça cayó ante el Veszprém (34-39) en las semifinales del Mundial de Clubes en un partido que se acabó decidiendo en una prórroga cruel para los culés. Los de Carlos Ortega, que a falta de 10 minutos del tiempo reglamentario consiguieron ponerse por delante, fallaron en los momentos clave ante un cuadro húngaro que no perdonó.

Frade y Dika Mem abrieron la lata para el Barça en un choque de titanes entre dos de los mejores equipos del mundo. Los húngaros se mostraban muy sólidos detrás y provocaban los primeros fallos de su rival para arrancar comandado por 3-5. El exazulgrana Luka Cindric hacía daño en sus primeras internadas y el Veszprém empezaba a idear un partido incómodo para los catalanes. En la guardameta, Corrales volvía a exhibir sus mejores dotes atléticas y se hacía enorme cada vez que hombres como Carlsbogard o Aleix Gómez cargaban el disparo (5-8), un protagonista habitual en los enfrentamientos directos entre estos dos conjuntos. El portero español quería lucirse en estas semifinales.

CORRALES FRENA EL ÍMPETU CULÉ

El Veszprém imponía su ley en el ecuador de la primera parte ante un Barça incapaz de recortar esa renta negativa de tres goles, y tenía que salir al rescate el de siempre, un Dika Mem ya en plenitud física que conseguía levantarse por encima del muro húngaro y encontrar las mallas. Ortega alentaba a los suyos en línea de banda mientras Emile Nielsen empezaba a hacer de las suyas tras relevar a Gonzalo bajo palos; en el otro lado N'Guessan estrenaba su cuenta goleadora (10-11). La entrada del meta noruego fue determinante para acercar a los culés en el luminoso, aunque toda buena acción suya era replicada por un colosal Corrales que volvía a poner tierra de por medio (10-13). Un último 'golazo' de Petar Cikusa fue lo mejor de un primer tiempo en el que los húngaros habían sido superiores (13-15).

EL GUION NO CAMBIA

El paso por los vestuarios no favoreció a los de Ortega, que encajaron dos tantos consecutivos para un Veszprém que puso la máxima hasta el momento (13-17). El que más daño hacía ahora era el excapitán azulgrana Ludovic Fábregas, aunque Emil Nielsen detenía la sangría con un penalti parado en el otro lado. El Barça remaba, pero cualquier atisbo de remontada era contestado por los pupilos de Pascual.

NIELSEN SE HACE GRANDE

A falta de 20 minutos, empezaban a saltar las alarmas en el banquillo culé (21-23). El cronómetro apretaba y el guion de partido no cambiaba. Esos dos goles de diferencia eran un muro infranqueable para los catalanes en un encuentro que se decidía por detalles y en el que la tensión podía cortarse con un cuchillo. Pero recuerden, el rey de Europa no se rinde nunca y consiguió empatar la contienda por primera vez a través de Blaz Janc (25-25). Cada balón valía su peso en oro. El Barça ponía la directa y, aprovechando un pequeño bajón de Corrales, se adelantaba a través de Aleix Gómez (28-27). Una obra de arte de Nielsen y el tanto de Dika Mem desataban la locura en el banquillo azulgrana (29-27), pero el Veszprém contestaba empatando el partido. A falta de 18 segundos, Aleix falló el penal que pudo suponer la victoria y el partido se fue a la prórroga (29-29).

LOS HÚNGAROS SENTENCIAN

El Veszprém consiguió una ventaja considerable en los primeros compases del tiempo extra y se hizo amo y señor del partido (30-33) con un Fábregas imperial. El Barça, noqueado y fatigado, no pudo hacer sacarse ningún conejo de la chistera más y cayó derrotado con mucha dignidad (34-39). Los húngaros, merecidos finalistas del Mundial de Clubes.